Dirigentes de organizaciones sindicales del Paraguay se reunieron este fin de semana en Asunción y resolvieron marchar, por primera vez, el próximo 8 de marzo en el Día Internacional de la Mujer Trabajadora. La UNTE-SN, organización que integra la CLATE, es parte de la convocatoria que expresa la unidad sindical bajo el lema: KUÑAKUERA POKATU (Mujeres poderosas).
La asesora letrada de la Unión Nacional de Trabajadores del Estado (UNTE-SN), Cintia Ribas, fue una de las tantas mujeres sindicalizadas que participó activamente de una convocatoria por la unidad sindical para marchar por primera vez el próximo domingo por las calles de la capital paraguaya. “Se trata de un importante proceso de unidad de las tres centrales sindicales de nuestro país y en ese sentido el rol de las mujeres es muy importante. Por eso marcharemos juntas el 8 de marzo y hemos logrado unificar nuestros reclamos”, indicó.
En ese sentido, Ribas recordó algunas de las consignas más importantes que serán bandera de lucha el día domingo, durante la marcha que unirá la Plaza de la Democracia con la Costanera. La convocatoria comenzará a las 18 horas y se espera la participación masiva de mujeres de todos los ámbitos y organizaciones: sociales, sindicales, feministas, de derechos humanos, etc.
“Marcharemos por la libertad sindical, porque tenemos derecho a organizarnos y formar sindicatos. El Estado, a través del Ministerio del Trabajo impide la legalización de sindicatos y de esa manera es cómplice del incumplimiento de las leyes laborales, de la persecución y de los despidos”, explicaron las representantes sindicales en su convocatoria.
Además, indicaron que las mujeres sindicalizadas “alzamos la voz contra la precarización y rechazamos los contratos basuras en el Estado y el sector privado, incluyendo a fundaciones y ONGs”. También rechazan la tercerización, “cuyo verdadero objetivo es desconocer derechos laborales. ¡Basta de trabajo informal desprovisto de toda seguridad y beneficios”. Por eso dirán No a la Ley de Trabajo Parcial.
Con respecto a las trabajadoras del Estado, las Mujeres Poderosas denuncian que “estamos siendo atacadas por el Estado -con la asistencia de los medios de la prensa empresarial- que nos arrebata derechos adquiridos en luchas sindicales y contemplados en los Contratos Colectivos de Condiciones de Trabajo”.
“Reposo por maternidad, respeto a todas las leyes laborales, cumplimiento de los Convenios Internacionales y la defensa de los fondos jubilatorios”, son otras de sus consignas.
A nivel sindical, “luchamos y seguiremos luchando por mayor sindicalización de las mujeres trabajadoras y por más mujeres en los cargos directivos de los Sindicatos y Centrales Sindicales”.

También piden “el respeto a las trabajadoras sexuales como sujetas de derecho, a vivir una vida libre de violencia sin estigma ni discriminación, accediendo a todos los derechos, educación, salud integral, vivienda digna y justicia rápida ante los atropellos de sus DD.HH” y el “reconocimiento efectivo del trabajo doméstico y de cuidado de las mujeres y por el cumplimiento de las leyes laborales a las trabajadoras del empleo doméstico”.
Finalmente, reivindican el derecho “a vivir libres de violencia física, psicológica y sexual. No más acoso en el trabajo, en las calles, en los lugares de estudio. La justicia debe llegar de manera eficiente para garantizar la vida de las mujeres. ¡Basta de feminicidios! Por la protección integral de los hijos e hijas de víctimas de feminicidios”.